El nacionalismo serbio, todos esos intelectuales que ahora pretende lavarse las manos tras parir criminales como Milosevic y Karadzic, manipuló esos fantasmas para enfrentar a quienes no deseaban la guerra. (…) Después la miserable condición humana se disparó sola, e hizo el resto del trabajo.
Arturo Pérez-Reverte. Territorio Comanche
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